Con un reconocimiento a los bomberos del estado por ser pilar de las instituciones de seguridad y protección en Tabasco, el Gobernador Javier May Rodríguez encabezó el festejo dedicado a quienes con su heroísmo salvaguardan la integridad de las y los tabasqueños, y al mismo tiempo, con su entrega inquebrantable, se han convertido en un ejemplo de compromiso con el bienestar de las comunidades.
Durante la celebración del Día Nacional del Bombero, el mandatario estatal acentuó que, en Tabasco y en todo México, los integrantes de este gremio forman parte de la primera línea de atención y prevención ante emergencias, enfrentando con valentía los desafíos que la naturaleza y la vida cotidiana imponen.
Son guardianes de la vida que sólo en lo que va de 2025 han atendido 974 incendios, de los cuales 623 han sido siniestros de pastizales, lo que equivale a mil 147 hectáreas intervenidas, recalcó en la ceremonia donde entregó distinciones a personal operativo destacado por su entrega y trayectoria.
En compañía del coordinador del Instituto de Protección Civil del Estado (IPCET), Armado Pulido Pardo, y el director del Cuerpo de Bomberos, Miguel May Hernández, el jefe del Ejecutivo dimensionó la importación de quienes forman parte de esta institución, pues su labor abarca más de 30 tipos de servicios orientados a proteger a la población, entre los que destacan el rescate de personas ahogadas o en lugares de riesgo, primeros auxilios, combate a incendios en casa habitación y vehículos, entre otros.
“Cada llamado que reciben es respondido como un acto de entrega sin reservas, donde el bienestar de la comunidad es siempre la prioridad absoluta”, subrayó y dijo que con esta celebración el Gobierno del Pueblo refrenda su compromiso con quienes con espíritu de unidad y de servicio enorgullecen a Tabasco.
“Nuestra gratitud es profunda porque sabemos que en cada emergencia los bomberos actúan guiados por el valor, la solidaridad y el amor a su gente; su ejemplo nos inspira a seguir trabajando, hombro con hombro, por el bienestar y la seguridad de las familias tabasqueñas”, enfatizó.
El titular del IPCET, Armando Pulido, señaló que el oficio de los también llamados “apaga fuegos” es silencioso, discreto y sin alardes, pese a que se enfrentan a las adversidades y el peligro con valor, anteponiendo la vida de la población por encima de la suya propia. “Vale más arriesgarse por otros que quedarse inmóvil”, por lo que esta fecha significa un ejercicio de memoria y gratitud.
En la ceremonia efectuada en el Centro Cultural Quinta Grijalva, el director de Bomberos, Miguel May, estableció que, en Tabasco, “donde enfrentamos retos constantes por lluvias, inundaciones, incendios, las y los bomberos han demostrado siempre profesionalismo, dedicación y un compromiso inquebrantable con su deber; son un verdadero ejemplo de heroísmo para nuestra sociedad”, concluyó.
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