Las letras en mayúsculas, pero menudas, del Gobernador Javier May Rodriguez quedaron escritas entre las dedicatorias del director general del Tren Maya, general Óscar David Lozano Águila, y del diputado local Jorge Suárez Vela.
Los tres pasajeros viajaron, junto con las presidentas municipales de Tenosique, Sandra Beatriz Hernández Jiménez, y de Balancán, Beatriz Castañón Félix, arriba del Tren Maya, desde Tenosique hasta la Villa El Triunfo.
En breves pero emotivas palabras, el mandatario condensó el primer viaje entre las dos estaciones en el libro de visitantes distinguidos que le pasaron para la ocasión apenas cumplir su destino: «Con todo mi corazón», estampó con mano zurda.
Correspondió al tren 101 realizar el histórico recorrido entre las dos estaciones, que tuvo una duración aproximada de 37 minutos, saliendo de la recién puesta en operación Estación Tenosique a las 9:46 de la mañana, y arribando a la Estación El Triunfo a las 10:23 minutos.
Sabedor de la importancia de los trenes para los pueblos, el profesor Ángel Manuel Sabido, esperó pacientemente el arribo del Tren Maya procedente por primera vez de la Estación Tenosique a la estación de Balancán, para saludar al mandatario, a quien conoce desde que se comenzó a construir la estación del tren en la villa.
“El Gobernador en aquel entonces estaba a cargo de la construcción del tren, y vino a algunas de las reuniones que se hicieron en la Villa El Triunfo, aquí lo conocí. Y desde entonces sé que su corazón tiene mucho amor por Tabasco, y quiere la prosperidad para los paisanos”, contó el también inspector escolar.
Para apuntalar sus dichos no señala con su brazo extendido las vías del Tren Maya que corren arriba, sino que su índice apunta a las escaleras eléctricas que suben al área de ventanillas y al anden, y luego como si su brazo fuera una varita mágica, al elevador a on costado.
“Fue un acierto del Presidente Andrés Manuel resucitar los trenes que ya habían sepultados los gobiernos neoliberales. Y que May estuviera a cargo de la titánica tarea. Los hizo más modernos, más serviciales, eléctricos. Nada más sígame usted, ¿cuándo íbamos a ver escaleras eléctricas en nuestro pueblo, cuándo íbamos a subirnos a un elevador? Con el Tren Maya, El Triunfo está volviendo a resurgir”, afirmó.
En los años cuarenta, con la llegada de los Ferrocarriles del Sureste para trazar las vías, nació esta villa. Se dice que los trabajadores cuando alcanzaron este sitio, coincidieron por unanimidad que fue un triunfo haber llegado hasta aquí. Y así nació El Triunfo, que en la época de mayor bonanza tenía una vida de 24 horas, por la gente que venía a viajar en el tren, y los comercios y hoteles que alojaban al gentío.
En el mismo tren en el que descendió el mandatario y sus acompañantes, ascendió doña Socorro Balam; su esposo, don José Amalio la acompañó hasta el andén.
Ella se dirige a Calkiní, donde es maestra de educación básica, don José Amalio explica que sin la vía del Tren Maya hubiera sido complicado el traslado de su compañera porque hubiera tenido que transbordar varias veces, desde Cuatro Poblados hasta la escuela donde da clases, en Calkiní.
“Ahora con el Tren Maya se nos hace más fácil la movilidad, llegamos sin tanto tiempo y sin transbordar. Yo veo con mucha satisfacción que ha empezado a crecer de nuevo la villa, se ven más taxis, hay más actividad económica y más movimiento. Y ahora que el que estuvo a cargo de la construcción del Tren es nuestro Gobernador, nos empieza a ir mejor”, resaltó.
En el andén hay pasajeros procedentes de El Naranjo y El Machetazo, que les queda más cerca la Estación El Triunfo para desplazarse que la propia Estación Candelaria. “La gente va reconociendo las estaciones, ahora se suma la Estación Tenosique, no tardará en venir más gente”, auguró el profesor Ángel Manuel después de tomarse la foto con su amigo el Gobernador.
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